PACHÓN NAVARRO EN LADERA Y EN CAZA REAL.
En Requena (Valencia) se dieron las condiciones adecuadas para estrenar un nuevo modo de evaluar Pachón Navarro en pruebas de caza real: en campo monte bajo y en ladera, hasta 90 minutos de perdiz al salto.
Bajando desde Alagón (Zaragoza) a la comunidad valenciana, en el término de municipal de Requena, los socios del Círculo de Cazadores y Criadores de Pachón Navarro y muchos simpatizantes de la raza, nos reunimos una vez más en un ambiente ameno, agradable y amigable. En unos terrenos del coto El Rincón, en la localidad de El Rebollar. Terreno duro y seco, último fin de semana de marzo. Con cobertura de romeros, chaparras, aulagas y algún pino suelto, con una temperatura templada y con poco aire, con perdices que dieron su juego, para que los perros pudieran demostrar sus facultades.
La prueba consistía en dos días de caza. Sábado tarde, reservado para la prueba TAN (Cachorros) a cargo de Carlos Contera, juez de admisión y selección. Después, al Hotel donde tras una buena cena, tuvo lugar una amena charla, donde todo el mundo se informó de la actualidad y también donde se maquinó lo que al día siguiente dio sus resultados. Ya el Domingo bien temprano, tras un buen desayuno para coger fuerzas para la mañana que nos venía, nos encontramos puntualmente, como estaba previsto, todos en el campo-, donde se juzgaría las clases selección y trabajo (Cabello y Espuny).
El devenir de las pruebas PMC, su repetición, la experiencia acumulada, el dominio de los organizadores y el clima de superación inherente a nuestro programa de selección, aconsejan mejorar el sistema de caza para la evaluación de nuestros perros de muestra. Un desafío para los responsables y una complicación más para los organizadores y el coto. La organización -capitaneada por Julián García Malla- estuvo magnífica, permitiendo que todo fuera fluido y ameno. Inspirados en el estilo que usan los franceses con sus razas de rastro sobre conejo y jabalí (lo que ellos llaman “brevets de chasse”), hemos probado un sistema de caza al salto –en ladera- de duración breve. Como es cierto que los llamadosbrevets se desarrollan en condiciones plenamente naturales, también sobre piezas silvestres, puede decirse que hemos aplicado el espíritu del rastro a pruebas de caza para perros de muestra.
La perdiz de Requena fue sembrada y mejorable, pero esto no quita que se pueda utilizar el mismo reglamento también en caza salvaje. El terreno estaba seco. Más de una docena larga de perros pudo puntuar. Esto es caza no competitiva. Se trata de evaluar la habilidad de los perros, no de rivalizar por un premio. Aquí reside la grandeza de este nuevo sistema, que en adelante aplicaremos al reglamento del club. Este es el humor que embriaga a cazadores de verdad. Aquí no se compite, se evalúa qué ejemplares merecen contribuir a la siguiente generación de perros cazadores. El sistema permite -como en efecto, pasó– partir de regreso a casa y comunicar resultados y opiniones por correo. No hay vencedores, ni vencidos. Hoy por mí, mañana por ti. Camaradería y espíritu de mejora.
Los señores Contera, Espuny y Cabello, calificadores de la prueba, demostraron ser de carne y hueso. Materia mortal y nada infalible. Son cazadores que emiten una opinión, un dictamen en puntos, grandes charlas, grandes conversaciones, gran alubiada. El nuevo sistema fue un éxito sonado, todo el mundo en Requena hablaba de lo bien que había salido y que resultaba un sistema más real y divertido, sesenta minutos (o más, hasta noventa) de caza, más completo y más exigente. El sistema es innovador para nuestros socios y aficionados. Aunque promete más satisfacciones… En el fútbol, Juanito dejó dicho aquello de que ‘noventa minuti son molto longo’, lo mismo puede decirse en la caza a rabo. Pudimos ver buenas búsquedas en lo difícil; paradas y guías; buenos cobros; trasteo como debe ser, entre matas y arbustos; algunas recuperaciones excelentes de perdices alicortadas y de torre.
Llevamos nueve años de club, funcionando colectivamente y es de mucho mérito avanzar a 60 o 90 minutos de caza real, sobre perdiz sembrada. La mitad de los cazadores españoles, cazan hoy sobre perdiz criada en cautividad, llámese de refuerzo o de suelta. Los que cazan sobre caza salvaje, por suerte, tienen pocas oportunidades y necesitan muchos días de caza para cuajar un perro... Como colectivo, seguro que necesitaremos algunas pruebas más. El experimento de Requena dará forma -ya está redactado un nuevo reglamento provisional- a una forma de ver los perros que no se atreve a aplicar ningún club de raza de los actuales, ni siquiera las pruebas polivalentes de los alemanes contemplan este estilo, que se parece más a los brevets de caza con sabuesos de conejo, de los que domingo tras domingo se celebran en Francia, sin tiro ni muerte de la caza, si no es a diente. Esta modalidad no es tan original, pues muchos aficionados franceses y españoles, varios clubs y jueces practican -sin tiro-desde hace décadas. Sin embago, aquí resultaron chocantes para algunos cazadores de 'a rabo'. Lo importante de esta prueba -concebida como caza al salto de duración breve- tiene algunas ventajas en cuanto a veracidad, flexibilidad, entretenimiento, matar el gusanillo, rivalidad...
La caza de verdad es cuestión del cazador aficionado y del criador. Su criterio nunca lo vamos a poder suplantar, sólo debemos aspirar como colectivo a ofrecerle oportunidades de información. Plantear jornadas completas de caza real y no sembrada ya lo estamos haciendo desde el Círculo, hace bien de años, en la cacería anual ‘de fraternidad’. Allí se ha visto cazar varios dias y delante de aficionados/socios a importantes sementales como el Dandy, el Arco, el Roco, el Ono, el Gelo, el Loco, el Win. Hembras muchas más. La más reciente jornada consistió en dos días con el Roco, Lito y el Arco, en Ciudad Real. Algunas de estas experiencias nos han permitido tomar la decisión de cruzar con estos perros, eligiendo mejor las hembras y con buenos resultados en los productos. Sin duda, la participación es la piedra clave de la progresión en grupo: los que siguen sin traer sus productos a las pruebas monográficas de caza, ni incitan a sus propietarios a que se dejen ver, no tienen excusa con esta nueva forma de evaluación. Después de la prueba de Requena, ya obra en poder de la Junta un proyecto de texto para la ampliación del reglamento de pruebas monográficas de caza. Al aprobarse, situará las pruebas PMC del Círculo -con sus limitaciones- en los test de valoración más fiables del entorno de perros de muestra nacionales y seguramente internacionales.
En lo tocante a las clases, destacar, los dos machos que presentó Julián García, que demostró lo que en otras ocasiones: trotadores estrictos, tanto el padre Alajú Dandy, como el hijo Contador, cazando en la distancia, equilibrado, escudriñador, duro en la maleza, muestra fija con muy buena guía (típica muestra a la española, levantando suave), buen cobro con boca suave. El núcleo de cría de Valencia se está desplazando hacia Requena, animada por José Ignacio López, con ejemplares jóvenes de mucho futuro y una nueva camada del Dandy en ciernes, uno de los perros más puntuados en pruebas de trabajo en la historia de la raza. Por lo demás, constatamos la incorporación de nuevos criadores de pocos perros, la calidad creciente de la producción de Francisco Nieto y la necesaria supervisión de los perros a incorporar en el ya inminente libro genealógico del Círculo a través de los nuevos DIR (diagnostico inicial para registro) y las confirmaciones TAN. Mensaje especial para los socios: ¡atentos! a las noticias del muy trabajado Libro electrónico de Orígenes y Méritos del Pachón Navarro, que está a punto de nacer y presentarse en sociedad.
C.C.C.P.N.